Masoquista.

Sadomasoquista, es una relación que me enquista, confesada declaración, siempre sin ambición, malicia se siente en su compañía, aun así yo al lado suya permanecía, encoñada como una cría, y el que ni una mirada mía se merecía, mi autoestima y espiritualidad sin su presencia perecía, pero yo ya acepté que esa relación expiaría, aun así, cabezota fui, insistía en algo que no llegaría a ser real, en cambio era todo lo contrario, el era desleal, falle y empeoro mi rutina mental. En la escritura soy letal, con mi corte criminal, fanática de lo animal.

*El aprovecho y me leyó mis tatuajes, en un par de veces, nos fusionamos como un par de salvajes, deshaciéndonos de nuestros ropajes, quedamos como Adam y Eva en el Edén de nuestras pieles tatuadas, esas historias serán olvidadas.

Hace unas horas le mande un manuscrito de prueba, haciendo girar el engranaje entre rueda y rueda de mi cerebro, yo con cada tema que saco me alegro, saliendo para delante, de nuevo mirada de frente, cada caída no es igual, cambia en diferente ambiente, yo me hago pasar por venenosa serpiente, siempre como un piton paciente, la paciencia me sobra, planificando mi siguiente paso en mi obra, deseando volver a trabajar, buena en perfeccionar la maniobra, entre semana trabajando deseas que llegue el finde y la nómina, lo que un trabajador cobra.

Sera que pague mi mal acto, ahora sobre todo conmigo misma y los míos pacto, aunque aun me queda la ligera sensación de la cual el me impacto, tierno y suave me devoro, no pienso excusarle, solo de mi mente expulsarle, lo que la música me da, es la cura, droga mas fuerte que el amor, aunque se considere que el ultimo es una adicción que conlleva mono, me toca sintonizar y cambiar el tono, no solo es blanco y negro, hay grises que a veces dejan pequeñas cicatrices, y seguir para mi las preparadas directrices.